¿Qué es Open House Rosario?
En el mismo sitio web del evento lo definen como un festival anual de arquitectura que consiste abrir las puertas de diversos edificios de gran valor arquitectónico, cultural e histórico, que habitualmente se encuentran cerrados al público, para que toda la comunidad pueda conocerlos de manera gratuita. Es un festival que con origen londinense con presencia en más de 50 ciudades del mundo entre las cuales se encuentra Rosario desde el año 2018.
Se encuentra dirigido a todos aquellos interesados en descubrir y redescubrir la arquitectura y el urbanismo de la ciudad participante. El evento ofrece la posibilidad de ingresar y recorrer, de forma gratuita, una selección de edificios privados y públicos durante un fin de semana a puertas abiertas.
A nivel local, el encuentro está organizado, dirigido y coordinado por OHACHE, una Asociación Civil conformada por integrantes provenientes de múltiples disciplinas.
Entendemos que la arquitectura hace ciudad, la construye y por ende es patrimonio de todos. Las fachadas que vemos a diario cuando caminamos, en el colectivo, en el taxi, en bici, son nuestro paisaje urbano, nuestra visual cotidiana. Tener la posibilidad de abrir esa fachada, ese límite a quien le genera curiosidad nos parece interesante y «Open House» es entonces la herramienta que encontramos para que esto suceda.
Asociación Civil OHACHE
Cientos de voluntarios hacen posible Open House Rosario, guiando recorridos, compartiendo historias y abriendo espacios únicos al público de forma generosa y desinteresada. El acompañamiento de sponsors y aliados es clave para la realización de Open House Rosario, apoyando la logística y haciendo posible este encuentro cultural gratuito.
Abriendo puertas
Open House brinda la posibilidad de conocer y recorrer edificios de gran valor cultural, histórico, patrimonial y arquitectónico que habitualmente se encuentran cerrados al público. Los recorridos se realizan con la colaboración de voluntarios, profesionales y propietarios que generosamente ofrecen su tiempo y sus locaciones para acompañar y comentar a los visitantes las historias, anécdotas y vivencias de cada espacio.
El objetivo del concepto «Open House» es generar un diálogo entre las comunidades (que son los habitantes de Open House), los arquitectos y los políticos, logrando a partir de esto un mejor entendimiento de la arquitectura y el entorno construido, y la importancia de pensar desde hoy y hacia el futuro, en una ciudad diseñada para todos.
Victoria Thornton – Creadora de Open House Worldwide
Anualmente, los organizadores difunden en su sitio web y redes sociales la lista de lugares que se pueden visitar, algunos de ellos con gran valor arquitectónico o de enorme trascendencia histórica para qué, en función de la descripción de las obras, su ubicación en el plano, y tus propios gustos e intereses, puedas planear un recorrido que te ayude a optimizar el tiempo y poder visitar más lugares.
Las visitas no requieren inscripción previa; sólo hay que estar presente en el lugar indicado al horario señalado y exhibirles DNI o pasaporte a los voluntarios de la organización para registrar el ingreso. En algunos lugares está permitido filmar y/o tomar fotografías; pero en otros lugares no. Recordemos que muchos sitios son propiedad privada donde residen familiar o tienen su sede instituciones que gentilmente abren sus puertas para que las conozca, pero no desean exponer demasiado su privacidad.
Recorriendo la ciudad
Dentro del Open House, también hay recorridos a pie. El ofrecimiento es recorrer la ciudad para redescubrirla de una manera diferente, donde cada itinerario invita a conocer la arquitectura, la cultura y la historia de nuestra ciudad. La experiencia a pie permite distinguir esos pequeños detalles que muchas veces no percibimos en el día a día. La filosofía es romper con los circuitos convencionales para conocer la ciudad de Rosario vivenciando sus espacios urbanos.
Asi, mediante paseos guiados por barriólogos, voluntarios, arquitectos, conocedores o simples entusiastas voluntarios podremos ser turistas de nuestra propia ciudad, descubriendo datos, elementos y tesoros ocultos a la vista de todos.
Open House en Pichincha
Año tras año, nuestro barrio no queda exento de participar den Open House. Son varias las propiedades que abren sus puertas permitiendo que entusiastas de la arquitectura y de la historia recorran sus instalaciones.
Así, por ejemplo, durante la edición del año 2021 se pudo visitar el Edificio Mirador (Avenida del Valle 2799) que se instala en el trazado buscando responder a claros valores del mercado inmobiliario que hoy caracterizan una parte de la arquitectura que se desarrolla en la ciudad de Rosario. Incorpora un valor agregado a esta condición gracias a la apertura que se genera al paisaje que ofrecen el Río Paraná, las islas y todo su entorno.
El año 2025 dio paso al Edificio Brown evocando un estilo industrial que rememora el pasado portuario de la zona. El estudio Masea se propuso integrar, en un edificio de viviendas, el mismo nivel de detalle y creatividad presentes en las reformas de casas que suelen realizar, con la reutilización de materiales reciclados, intervenciones artísticas, herrería de diseño, entre otros elementos. También se pudo recorrer el inmueble de Edificio Patrimonio (Jujuy 2861) que fue catalogado por la Municipalidad de Rosario como de valor patrimonial. Se busca actualizar los usos para vivienda y locales comerciales mediante acciones de conservación, reformas y ampliaciones.
Para el año 2024 se pudo recorrer la Usina Social, donde funciona un espacio abierto de encuentro y participación ciudadana. Allí se desarrollan actividades culturales, ciclos de debate, módulos de enseñanza y aprendizaje y demás acciones relacionadas a proyectos con compromiso social. La idea era recorrer sus espacios interiores, los cuales fueron reestructurados y reacondicionados para albergar diferentes actividades y usos.
Suele abrir sus puertas el local de Archie, donde funcionó en antiguo prostíbulo Petit Trianon. Así, en su primera edición de 2018 como en la de 2023. Se lo describía como un inmueble con un gran patio cuadrado, de mosaicos blancos y negros, lustrosos. En un ángulo, una victrola. Sillas tapizadas, contra la pared. La escena la completaban parejas bailando muy formalmente. El Trianón costaba tres pesos, la segunda tarifa en importancia y olía a violetas, no a sudor.




Muchísimas gracias por la mención y tan buena cobertura del evento y el recorrido. Sigamos descubriendo Pichincha!